APLICACIÓN DE TOXINA BOTULÍNICA

 

Como consecuencia de las contracciones de los músculos faciales, con el paso del tiempo se producen líneas de expresión o arrugas más o menos profundas, a nivel de la frente, periorbiculares o “patas de gallo” y el entrecejo, entre otras.

La aplicación de toxina botulínica tipo A se realiza estratégicamente en el músculo responsable de la línea o arruga de expresión, causa su relajación temporal y brinda al rostro una apariencia más descansada, rejuvenecida y agradable.

Correctamente aplicado, el resultado es muy natural.

Luego de la aplicación de toxina botulínica tipo A, los efectos se aprecian a partir de las 48-72 hs. y se completan en 7 a 10 días. La duración total del efecto varía entre 4 a 5 meses.

El procedimiento se realiza en el consultorio en pocos minutos, no requiere anestesia ni tiempo de recuperación.

Frecuentemente combinamos el tratamiento con toxina botulínica con otras técnicas de rejuvenecimiento facial.